EcoBici: cuando es más necesario, se levantan 200 estaciones y el sistema público de bicicletas está en retroceso.

Por motivos vinculados a la pandemia, el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires (GCBA) anunció en mayo la reapertura del sistema público de bicicletas (EcoBici, licitado por Tembici) pero con una reducción a la mitad en la cantidad de bicicletas y estaciones disponibles. Con el nuevo esquema, quedarían en circulación unas 2000 bicicletas y unas 200 estaciones.

De curioso que soy, decidí mapear las 200 estaciones en funcionamiento y las 200 que se habían retirado. A continuación, les cuento por qué me preocupa el mapa resultante y también, por qué es necesario mirarlo con cierta perspectiva.

Lo primero que llama la atención respecto de la reapertura del sistema es la drástica reducción a la mitad. No fue posible encontrar una comunicación específica sobre el motivo por el cual sucedió esto, ni se dio información sobre algún interés de restablecer el sistema en las cantidades que debería estar funcionando.

Desde la comunidad ciclista, vemos esto con mucha preocupación puesto que la política de movilidad sustentable del GCBA ha conseguido impulsar el uso de la bicicleta en la ciudad de manera muy exitosa. No obstante, nos cuesta mucho entender por qué cuando más esfuerzos hay que poner desde el Estado en impulsar el uso de la bicicleta, la Ciudad da una marcha atrás tan significativa.

En segundo lugar, es importante analizar cuáles estaciones retiraron, cuáles quedaron y qué hay detrás de esa decisión. Mi lectura es que, si bien parece haber una intención de sostener presencia en gran parte de la ciudad, la ubicación de las estaciones muestran que el sistema nunca llegó equitativamente a todos los barrios y tampoco tiene la misma presencia en los barrios en los que sí está. Por ejemplo, en los 10 barrios porteños que limitan con la Av. General Paz, tan solo llegó a haber 16 estaciones de EcoBici y la gran mayoría de éstas estaba en los barrios del norte. De estas estaciones quedaron cuatro, también en los barrios más al norte.

Barrios como Versalles, Liniers, Villa Luro, Monte Castro, Villa Real, Villa Riachuelo, Vélez Sarsfield y Mataderos nunca tuvieron la oportunidad de experimentar el sistema público. En estos barrios viven unas 256.000 personas, es decir, cerca del 10% de los vecinos de la ciudad.

Es llamativo observar cómo las estaciones restantes son principalmente las del centro y del corredor noroeste, y –sobre todo– la gran cantidad de estaciones retiradas en los barrios menos céntricos. El vacío que dejan estas estaciones retiradas marca un claro anillo que denota el retroceso del sistema hacia un funcionamiento similar al de finales de 2018.

En definitiva, los datos nos dan indicios de un proceso de reducción del sistema público de bicicletas. Esto podría explicarse meramente por cuestiones de la pandemia, pero lo cierto es que –como les cuento a continuación– esto viene sucediendo hace tiempo y nos preocupa.

Foto propia de Bicivilizados.org. Plaza Arenales Villa Devoto 2019-2020

En junio de 2019, el sistema había alcanzado su pico en cantidad de viajes realizados luego de una rápida implementación pero desde diferentes espacios como el movimiento activista del uso de la bicicleta, los usuarios del sistema, espacios políticos, la academia, etc., se ha alertado sobre la baja considerada de bicicletas desde octubre de 2019 y la comunidad supo respaldar esto con los datos que el mismo GCBA aporta de manera libre. Los datos muestran cómo, desde la instalación del sistema en su capacidad máxima, cada vez hay menos bicicletas disponibles.

Pocos meses después, en enero de este año ocurrió otro episodio llamativo: decidieron remover 20 estaciones del sistema. Los argumentos de esta decisión fueron poco claros y no fueron expedidos mediante medios oficiales. Algunos usuarios decidimos buscar dónde estaban esas 20 estaciones e identificamos que estaban todas en el sur de la ciudad. Rápidamente, los medios levantaron esta noticia y días después, la justicia decidió ordenar el restablecimiento de las estaciones en cuestión.

Al comienzo de la pandemia, el sistema fue cerrado y a su vuelta se dijo que iba a estar funcionando a mitad de capacidad. No obstante, otros estudios de los datos mostraron que, si bien debería haber 2000 bicicletas en uso, nunca llegó a haber más de 1200. Este número representa, en primer lugar, menos de un tercio de la capacidad para la cual fue concesionado el servicio y, en segundo lugar, una muestra de una distorsión entre lo que el GCBA anuncia y lo que efectivamente pone en práctica.

¿Se está reduciendo la inversión en bicicletas públicas? ¿Vamos a volver a tener el sistema en funcionamiento como se nos prometió? ¿Seguirá siendo gratuito? ¿Se logrará extender el sistema a toda la ciudad? Desde la comunidad ciclista escucho frecuentemente esas dudas y también la necesidad de ser parte de las decisiones que se tomen al respecto. Estamos verdaderamente preocupados por el futuro de EcoBici y llamamos al GCBA a dar explicaciones y redefinir sus prioridades de transporte.